21 de noviembre +Santoral
La Presentación de Nuestra Señora Esta tradición –según la cual los padres de la Santísima Virgen la ofrecieron al templo para ser educada entre las vírgenes– fue recogida por San Juan Damasceno.
  Devociones marianas en el mundo

oct2013

La Conversión del Santo Duque de Gandía, Francisco de Borja, Francisco Ricci, 1658 – Iglesia del Colegio Imperial, Madrid
Artículo de portada
San Francisco de Borja
El pequeño ducado de Gandía, perteneciente al reino de Valencia, era gobernado a comienzos del siglo XVI por don Juan de Borja. Estaba casado con doña Juana de Aragón, nieta, por una rama bastarda, del rey Fernando de Aragón, esposo de Isabel la Católica...

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Palabras del Director   V

 

 

 
Estimados amigos:

«Sic transit gloria mundi…»

Esto es lo que debió haber pensado San Francisco de Borja aquel año de 1529, cuando fue comisionado por el emperador Carlos V para conducir los restos mortales de la infortunada emperatriz Isabel —muerta en el apogeo del poder y de su extraordinaria belleza— hasta el Panteón Real en Granada. Después de quince días de viaje, en medio de un tórrido verano peninsular, el futuro General de la Compañía de Jesús, tuvo que reconocer ante los notarios aquel cuerpo en avanzado estado de descomposición — ver artículo en la sección Vidas de Santos.

«Sic transit gloria mundi…»

Durante más de cinco siglos, esta frase fue usada en el ritual de la ceremonia de coronación de los Papas. A medida que el Sumo Pontífice recién electo salía en silla gestatoria de la sacristía de la Basílica de San Pedro, la procesión se detenía tres veces. En cada descanso, el maestro de ceremonias se arrodillaba delante del Papa, sosteniendo una caña de plata o de bronce con un pedazo de lino ardiendo. Por tres veces consecutivas, a medida que el paño se iba quemando, decía en voz alta y lúgubre: «¡Sancte Pater, sic transit gloria mundi!» (Santo Padre, así pasa la gloria del mundo). Estas palabras, dirigidas al Vicario de Cristo, servían para recordarle la naturaleza transitoria de la vida y de las honras terrenas.

«Sic transit gloria mundi…»

Debemos meditar nosotros también, ya que es propio de necios pensar que uno no se va a morir — lo afirma Plinio Corrêa de Oliveira en un comentario colateral del artículo Explicitar: significado e importancia para la vida intelectual, que ofrecemos a nuestros lectores como Tema del Mes de la presente edición.

En Jesús y María,

El Director

 

 
Estimados amigos:

«Sic transit gloria mundi…»

Esto es lo que debió haber pensado San Francisco de Borja aquel año de 1529, cuando fue comisionado por el emperador Carlos V para conducir los restos mortales de la infortunada emperatriz Isabel —muerta en el apogeo del poder y de su extraordinaria belleza— hasta el Panteón Real en Granada. Después de quince días de viaje, en medio de un tórrido verano peninsular, el futuro General de la Compañía de Jesús, tuvo que reconocer ante los notarios aquel cuerpo en avanzado estado de descomposición — ver artículo en la sección Vidas de Santos.

«Sic transit gloria mundi…»

Durante más de cinco siglos, esta frase fue usada en el ritual de la ceremonia de coronación de los Papas. A medida que el Sumo Pontífice recién electo salía en silla gestatoria de la sacristía de la Basílica de San Pedro, la procesión se detenía tres veces. En cada descanso, el maestro de ceremonias se arrodillaba delante del Papa, sosteniendo una caña de plata o de bronce con un pedazo de lino ardiendo. Por tres veces consecutivas, a medida que el paño se iba quemando, decía en voz alta y lúgubre: «¡Sancte Pater, sic transit gloria mundi!» (Santo Padre, así pasa la gloria del mundo). Estas palabras, dirigidas al Vicario de Cristo, servían para recordarle la naturaleza transitoria de la vida y de las honras terrenas.

«Sic transit gloria mundi…»

Debemos meditar nosotros también, ya que es propio de necios pensar que uno no se va a morir — lo afirma Plinio Corrêa de Oliveira en un comentario colateral del artículo Explicitar: significado e importancia para la vida intelectual, que ofrecemos a nuestros lectores como Tema del Mes de la presente edición.

En Jesús y María,

El Director
Verdades Olvidadas
Quien no tiene a María por Madre, no tiene a Dios por Padre
Así como en la generación natural y corporal concurren el padre y la madre, también en la generación sobrenatural y espiritual hay un Padre, que es Dios, y una Madre, que es María...

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SOS Familia
Eutanasia para recién nacidos
Sin duda fue chocante e indignante la noticia sobre la proyectada legalización de la matanza de recién nacidos enfermos en Holanda...

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Página Mariana
Nuestra Señora del Cisne
Las personas han perdido hoy, en gran medida, la noción del pecado. Si esta o aquella actitud incorrecta no tiene importancia para ellas, imaginan que lo mismo valdría para Dios...

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Plinio Corrêa de Oliveira
Explicitar
En homenaje por el 18º aniversario de su fallecimiento, transcribimos a continuación extractos de una conferencia proferida el 22 de julio de 1974, por el Prof. Plinio Corrêa de Oliveira, sobre la importancia de la explicitación para la vida intelectual...

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Vidas de Santos
San Francisco de Borja
El pequeño ducado de Gandía, perteneciente al reino de Valencia, era gobernado a comienzos del siglo XVI por don Juan de Borja. Estaba casado con doña Juana de Aragón, nieta, por una rama bastarda, del rey Fernando de Aragón, esposo de Isabel la Católica...

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La Palabra del Sacerdote
¿Qué significa las puertas del infierno?
La consulta se refiere evidentemente al pasaje del Génesis en el cual Dios maldice a la serpiente por haber inducido a Eva a desobedecer el mandato divino de no comer el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal...

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Ambientes Costumbres Civilizaciones
Peregrinando dentro de un vitral
Imaginemos un vitral en forma circular, o sea, un rosetón. Un mundo de colores diferentes. Dentro del conjunto de colores, se podría hacer un paseo: ora “entrar” en el cielo color de añil, ora en el dorado absoluto...

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