Estimados amigos:
El día 25 de marzo de cada año la Iglesia
celebra la solemne fiesta de la Anunciación, en
la que se conmemora la Encarnación del Verbo
de Dios, el momento culminante de la Historia
humana
(ver artículo en la sección Lectura
Espiritual). En nuestro país, por iniciativa de
diversas instituciones pro-vida, el Congreso de la
República a través de la Ley 27654, del 23 de
enero del 2002, declaró tal fecha como “Día del
Niño por Nacer”.
La tenaz batalla que los enemigos de la
Iglesia y de la civilización cristiana despliegan
contra la despenalización del crimen del aborto,
no puede ser vista como una acción que promueva
el bienestar de la mujer, ni como un
emprendimiento aislado de grupos de personas
bien intencionadas aunque equivocadas. Sino
como la lucha desesperada de un movimiento de
carácter universal que, a través de la revolución
sexual, pretende transformar radicalmente el
orden moral cristiano, dos veces milenario,
nacido de las entrañas de nuestra fe católica,
apostólica y romana.
Con el fin de orientar a nuestros amables
lectores sobre este tema de palpitante actualidad,
iniciamos en este número de Tesoros de la Fe
la
publicación del docto y contundente estudio
“La revolución sexual destruye la familia”, de
nuestro incansable colaborador don Alfredo
Mac Hale, el cual nos proporciona una visión
conjunto de la tremenda embestida que sufre en
nuestros días la civilización cristiana en general
y la institución de la familia en particular.
Deseándoles una buena y provechosa lectura, me suscribo cordialmente.
En Jesús y María,
El Director