Palabras del Director Setiembre de 2018 – Año XVII

Estimados amigos:

La influencia demoníaca en la historia humana siempre fue constante e intensa. Es el empeño satánico por llevar a los hombres a la perdición, como sucedió con nuestros primeros padres en los orígenes de la humanidad, cuando bajo la apariencia de una serpiente el demonio los tentó, sugiriéndoles que si comían del “fruto prohibido” serían “como dioses”.

Adán y Eva cayeron en la tentación, cometieron el pecado original y perdieron el estado de inocencia. Toda su descendencia sufrió las consecuencias de tal pecado, quedando en adelante sujeta a la acción del demonio.

La acción diabólica se presenta de modo cada vez más avasallador en los diversos sectores de la sociedad neopagana en que vivimos, siendo numerosas las prácticas incentivadas por los demonios para poseer a las personas.

Nuestro Tema del Mes presenta ejemplos de diversos medios que utiliza el Maligno —como el ingenuo “tablero de Ouija”— para hacer caer a las personas en las redes del espiritismo e iniciarlas así en las prácticas ocultistas.

El rock satánico es otro medio por el cual el demonio se apodera de las almas, según la opinión de connotados exorcistas. También la práctica del aborto atrae demonios, pues estos desean que se les inmolen vidas humanas.

Frente a este terrible cuadro, el autor recomienda alejarse de supersticiones y de cosas esotéricas, procurar los auxilios de la Iglesia y, sobre todo, recurrir a la Santísima Virgen, invocada como “Terror de los demonios”.

Ella nos protegerá en esta época de tribulaciones, como enseña el apóstol san Pablo, “contra los dominadores de este mundo de tinieblas, contra los espíritus malignos esparcidos en los aires” (Ef 6, 12).

Deseamos a nuestros amables lectores una provechosa lectura de este relevante tema, que no debemos pasar por alto.

En Jesús y María,

El Director

La fachada de la Catedral de Sevilla La misericordia de Dios y la intercesión de los santos
La misericordia de Dios y la intercesión de los santos
La fachada de la Catedral de Sevilla



Tesoros de la Fe N°201 setiembre 2018


San Miguel arcángel, defiéndenos en el combate Cómo la acción diabólica impregna el mundo actual
Setiembre de 2018 – Año XVII La misericordia de Dios y la intercesión de los santos Sólo es camembert si es elaborado según la tradición Presencia diabólica en el mundo de hoy Marido y mujer: ¿tienen una idéntica autoridad en la familia? La fachada de la Catedral de Sevilla



 Artículos relacionados
Una nueva pieza teatral blasfema: “El Testamento de María” Una mujer de mente estrecha, vulgar, egoísta e incluso idólatra: así es como el autor irlandés Colm Tóibín presenta a la Santísima Virgen María en su novela titulada El Testamento de María...

Leer artículo

El Santísimo Nombre de Jesús El nombre de Jesús, es decir, del Salvador, es nombre que de suyo expresa amor, porque nos recuerda, como se expresa san Bernardino de Siena, cuánto el Hijo de Dios hizo y sufrió para salvarnos; por lo que con ternura le decía cierto devoto autor: ¡Oh Jesús, cuánto os costó ser Jesús, es decir, Salvador mío!...

Leer artículo

La muerte de un símbolo La repentina muerte del hombre-símbolo de una inmensa revolución igualitaria y relativista, capturó la atención de los medios en todo el mundo. Conozcamos el punto de vista de un escritor católico norteamericano...

Leer artículo

Un secreto... es un secreto La mañana del 14 de junio, temprano, partieron madre e hija para Fátima, María Rosa delante todo el camino hasta llegar a la casa de los Marto. Allí se detuvo la madre para aliviar su pena con tía Olimpia, y mientras tanto Lucía, llorando amargamente, cambió unas pocas palabras con Jacinta...

Leer artículo

San Benito José Labre Benito José nació el 26 de marzo de 1748 en Amettes, en la diócesis de Boulogne, al norte de Francia. Era el mayor de los 15 hijos de Juan Bautista Labre y Ana Bárbara, miembros de la clase media local, que dieron a su numerosa prole una profunda educación religiosa, de manera que varios de ellos siguieron la vocación sacerdotal...

Leer artículo





Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino