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Plinio Corrêa de Oliveira
Una ciudad que tuviera ¡como calles… agua; como casas… palacios; como habitantes… venecianos! ¡Cuánto hay de poético, de misterioso, de aventurero en todo ello! La góndola, el puente de los suspiros, el infortunio, el misterio malévolo y majestuoso que habita la ciudad. Pero, al mismo tiempo, recibiendo sus deliciosas comodidades al borde del agua. Lo aterciopelado de aquellos palacios de Venecia, la guitarra durante la noche, todo eso tiene para mi una expresión difícil de enunciar. Venecia tiene un lujo que es a mi modo de ver grave, sosegado, pero ¡de lanza en ristre! De manera que es un lujo de delicioso reposo, pero abierto para el entusiasmo de las batallas, muy equilibrado y pensativo. Venecia es muy pensativa, un tanto conspirativa…, pero conspirativa con inteligencia. Así como un tejedor teje una alfombra, un veneciano teje una conspiración… En Venecia, cada acuerdo político era tratado como un cristal. Ese pueblo dio origen a una completa transformación del lugar. ¡Y esa transformación del lugar dio origen a una ciudad que es la joya del mundo!
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Nuestra Señora de Sonsoles Dulce Protectora de Ávila |
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Elevación de espíritu ante dos catedrales Las torres de la catedral de Colonia, en Alemania, se lanzan al aire con un ímpetu vigoroso, ardiente y robusto, como si no hicieran el menor caso a la tierra... |
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La dignidad sacerdotal La dignidad del sacerdote es tal, que, según la expresión de san Agustín,* el Hijo de Dios encarna en sus manos como en otro seno de la Virgen... |
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El matrimonio después de Cristo Con la encarnación del Verbo de Dios, en el nuevo orden de la Redención, Jesucristo ascendió aún más esta institución, que ya por su origen era divina... |
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La devoción a la Virgen y la elección de la vocación “En la vida, yo voy a escoger mi propio camino” Este es el pensamiento de muchísimos jóvenes de hoy, si no de la casi totalidad de ellos. Que no se toman el trabajo de indagar si ese camino fue elegido por el propio Dios... |
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¿Qué sería de la sociedad si todos fueran igualmente ricos? De las desigualdades que vemos en este mundo entre pobres y ricos, forman los enemigos de la piedad un argumento especioso en contra de la divina Providencia... |
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